Descripción
Vuelve al hogar el papi-saoko de las Chicas Malas. Aquí le tenemos listo el batín y las zapatillas, la pipa, el güisqui, la cena hecha y el pastel de queso en la ventana enfriándose. Ese es un poco el espítitu de “Señora Batracio”, un tebeo al estilo de la sociedad estadounidense de los años 50 de amas de casa pluscuamperfectas, chalés de una planta con jardín y valla blanca, maridos que dicen pasar más tiempo en la oficina del que realmente pasan, cuando en realidad están buscándole cobijo fuera de casa a su churrito bailarín… todo esto insuflado con los temas que maneja habitualmente Heshka, amén del falso puritanismo: ciencia ficción retro futurista, mutaciones, seres deformes, violencia y pasión, como si se tratara de uno de esos tebeos –en su versión pasada de rosca– que ponían de los nervios a los legisladores más puritanos de los Estados Unidos que acabaron implantando el Comics Code y haciendo de la quema de tebeos una demostración de rectitud y salvaguarda de la decencia y la moral cristianas. Al paso que vamos, léalo antes de que vuelvan las hogueras.
Cambiando un poco de tema, dentro de un orden, que no todo va a ser vender y vender, échenle un ojo a la web de Heshkita, que es arenque ahumado con cebolletas. Por si usted no está al corriente, Ryan Heshka es en realidad conocido mundialmente como pintor. Híper productivo, estandarte y pionero del rollo low-brow. Sus lienzos neo figurativos reinterpretan los tópicos del cine y la cultura popular de mediados del siglo XX, mujeres fatales, extraterrestres, ci-fi, romances apasionados y violencia gratuita. Tanto amor por el cómic rezuman sus obras que, cuando se cansa de los lienzos, se marca tebeos como este –entre homenaje y parodia– que llora la Virgen de bonito que es. Suelto y libre, absolutamente fanzineroso y despreocupado por completo del éxito y la acogida, en la medida que son –parafraseando a El Maestro de Furillo – faenas de alivio.
Señora Batracio, al igual que las Chicas Malas, se crearon originalmente como personajes para algunos de sus cuadros. La Señora Batracio –Frog Wife– apareció en tres lienzos anteriores, que hemos reproducido cuidadosamente en unos tarjetones. Uno de ellos se incluirá de regalo en su pedido con la compra de este tebeo. Uno aleatorio. Así, a lo creisi-loco.